“A Mar Benegas le gustan las palabras, porque con ellas construye cuentos y versos…”
Y de su mente creadora y de su corazón solidario, surgió este poema que grita luz y mira desde el cielo saharaui a quienes viven exiliados en la dura hamada
si nos quitan la luz de la tarde
que nos alumbre la mirada de los niños
o el verso blanco y su millón de pájaros
el oleaje y el desierto incandescente
la paz y el brillo del agua mansa
aquellas manos que sostienen y acarician
si nos quitan la luz de la tarde
construyamos otras, cientos, miles
hasta que el sol se quede en un triste simulacro
Mar Benegas